Mole artesanal ¨Doña Jovita¨
“Si no sales a tocar puertas estas nunca se abrirán solas”
MOLE ARTESANAL ¨DOÑA JOVITA¨
Lo que sé, lo he aprendido de mis ancestros, mi madre, mi abuela, mi bisabuela… Y el secreto de este mole no fue una excepción.
Les contaré mi historia…
Cuando me case a todas las fiestas a las que asistía se acostumbraba comer mole, yo lo preparaba, como es sabido a los invitados se les da ¨un taco¨ o lo que le llaman el ¨itacate¨, esa misma gente que iba a las fiestas me empezó a decir que debería yo venderles un poco de ese mole que preparaba, poco a poco se fue corriendo la voz y más y más gente siguió pidiendo, así que decidí poner un pequeño letrero en la puerta de mi casa anunciando que se vendía mole en pasta, las personas poco a poco fueron llegando.
Mi nombre… Jovita Hernández Martínez, nací y crecí en el seno de una familia apegada completamente a costumbres y tradiciones, orgullosa de dónde vengo y de lo que soy.
Lo que sé, lo he aprendido de mis ancestros, mi madre, mi abuela, mi bisabuela… Y el secreto de este mole no fue una excepción.
Les contaré mi historia…
Cuando me case a todas las fiestas a las que asistía se acostumbraba comer mole, yo lo preparaba, como es sabido a los invitados se les da ¨un taco¨ o lo que le llaman el ¨itacate¨, esa misma gente que iba a las fiestas me empezó a decir que debería yo venderles un poco de ese mole que preparaba, poco a poco se fue corriendo la voz y más y más gente siguió pidiendo, así que decidí poner un pequeño letrero en la puerta de mi casa anunciando que se vendía mole en pasta, las personas poco a poco fueron llegando.
Así fue como inició esta mi maravillosa y amada empresa. En un principio, aparte de vender en mi casa, me iba al mercado de la Cruz y a la Cañada a dar muestras, poco a poco fui vendiendo más y mas.
Tengo 28 años haciendo mole, vendiéndolo 16 años ya, pero fue hasta hace un año y medio aproximadamente que me arme de más valor y decidí expandirme… al principio tenía mucho miedo, me asaltaban las dudas, pero pensé que nada debía detenerme; en ese momento no tenía el recurso económico para expandirme asi que investigue y fui a buscar al delegado de Hércules para pedir apoyo, él me mando con un Regidor del centro cívico y ¡lo conseguí!.
No quité el dedo del renglón, mi reto fue más bien superar mi miedo a fracasar, he mantenido mi negocio gracias a las ganas de trabajar, y a la constancia, siempre supe que mi producto era bueno, la gente me alentaba, pero como a todos el miedo al fracaso por momentos me hacia titubear.
Puedo decirle que a veces me siento cansada, pero sé que debo seguir adelante y que llegaré ¨hasta donde tenga que llegar¨; no ha sido fácil sin embargo ser mujer y demostrar que puedo cuando me lo propongo, me da animos para sobrepasar todos los obstáculos, solo sé que nunca debo perder las ganas de trabajar y así venceré todos los obstáculos que se me interpongan.
No dejo de cumplir mis objetivos y sigo poniéndome metas… a mediano plazo, entrar en todas las tiendas de Querétaro y a largo plazo, ¿Por qué no? Importar mi producto al extranjero, que la gente en el mundo entero lo conozca y sepan de donde viene, de mi familia, de mi estado, de mi país.
En este momento, mi mayor motivación soy yo misma, siempre me digo: ¡tu puedes, sigue!
Tú, que me estas leyendo, seguramente estas en alguna parte del camino que yo ya pase o seas como yo fui, sé que tienes las ganas de triunfar… lo que mi humilde experiencia te puede decir es que: siempre habrá obstáculos y que a veces uno se desanima pero hay que seguir adelante aunque este cansado, hay que tocar puertas y nunca perder de vista la meta principal, lo cuál te comparto estos tres consejos:
1.- SE CONSTANTE
2.- TOCA PUERTAS
3.- ¡ECHALE GANAS!, las cosas se hacen poco a poco, NO TE DESANIMES ni pierdas tus objetivos.
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Pedidos:
Jovita Hernández Martínez
Av. Hercules 109 Pte Querétaro, Qro.
Tel. (442) 223 49 73 Cel. (442) 382 76 37